Asentamientos multiamenazas Vol. 1: Incendios forestales y ruralidad

MARZO 2024

Prevención y adaptación: claves para enfrentar los incendios en la interfaz urbano-forestal chilena

Revista PLANEO N°58 | Asentamientos multiamenazas Vol 1: Incendios forestales y ruralidad | Marzo 2024


Por: [Carolina Ojeda Leal: Profesora de Historia y Geografía, Universidad de Concepción. Magíster en Desarrollo Regional y Medio Ambiente, Universidad de Valparaíso. Doctora en Arquitectura y Estudios Urbanos, Pontificia Universidad Católica de Chile].

 

Resumen:

Los últimos años han marcado un punto de inflexión en la percepción y el impacto de los incendios forestales en Chile, particularmente en las áreas donde la urbanización se encuentra con la naturaleza. Este fenómeno, lejos de ser episódico, es el resultado de una compleja interacción entre el cambio climático, la expansión urbana desenfrenada y una transformación del uso del suelo que ignora principios socioecológicos fundamentales. La región central de Chile, un área destacada por su rica biodiversidad y su papel crucial en la agricultura, ahora se enfrenta a un futuro marcado por sequías extendidas y una creciente vulnerabilidad a los desastres naturales. Esta columna analiza cómo la ausencia de una cultura de prevención y adaptación está creando un escenario donde los incendios forestales se vuelven más frecuentes y destructivos, subrayando la urgencia de replantear nuestras estrategias hacia una gestión más sostenible del territorio.

Palabras clave: Prevención, Adaptación, Incendios Forestales

 

 

“La prevención y adaptación emergen como pilares fundamentales para mitigar el riesgo de incendios. Estrategias como la gestión adecuada del uso del suelo, la creación de zonas de amortiguamiento entre áreas forestales y urbanas, así como la implementación de prácticas agrícolas y forestales sostenibles pueden reducir significativamente la vulnerabilidad de estas zonas ante el fuego”.

Fuente: Archivo personal de autor

En los últimos años, Chile ha sido testigo de un aumento significativo en la frecuencia e intensidad de los incendios forestales, particularmente, en las zonas de interfaz urbano-forestal (Instituto Nacional de Estadísticas (INE), 2020). Esta tendencia, lejos de ser un fenómeno aislado, refleja una realidad compleja en la que convergen el cambio climático, la rápida urbanización y la transformación del uso del suelo. Este país, conocido por su biodiversidad y su importancia agrícola, enfrenta ahora un futuro incierto, marcado por sequías prolongadas y una vulnerabilidad creciente a desastres. En este contexto, la presente columna examina cómo la falta de conciencia sobre la prevención y adaptación está configurando un escenario en el que los incendios forestales se vuelven cada vez más comunes y peligrosos.

Los incendios de interfaz urbano-forestal, aquellos que ocurren en la zona de transición entre áreas rurales y urbanas, presentan desafíos únicos, debido a la proximidad de asentamientos humanos y recursos naturales valiosos. Estos eventos no solo resultan en pérdidas económicas significativas y daños ambientales irreparables, sino que también ponen en riesgo vidas humanas.

La creciente incidencia de estos incendios en Chile puede atribuirse, en parte, a la expansión urbana descontrolada y a la transformación del uso del suelo sin considerar criterios socioecológicos. La conversión de terrenos forestales en áreas para el desarrollo urbano o la agricultura intensiva altera el equilibrio natural y reduce la capacidad del ecosistema para resistir y recuperarse de los incendios. Entonces, la urbanización acelera el cambio de usos tradicionales de la tierra hacia modelos no sostenibles en donde se aprecia un aumento en el abandono del campo, el éxodo rural hacia las ciudades que ha dejado numerosas tierras en desuso y fomenta la creación de interfaces urbano-forestal sin un control real del uso de suelo.

En ese sentido, los vicios que presentan muchos planes de desarrollo actuales que se realizan en Chile se dan porque quienes planifican utilizan “estrategias de copiar y pegar”, las cuales se importan o exportan a otras localidades sin considerar un hecho relevante, porque las metas a lograr son completamente diferentes para cada zona del planeta. Muchas veces los/as planificadores/as urbanos/as o arquitectos/as pasan por alto que la visión de futuro o vocación territorial que tienen las ciudades del sur no es la misma que las de otros lugares del mundo. Como lo expresa David Wong (2014) de la revista online Cracked, existe una diferencia sustancial entre lo que tratamos de decir con la palabra “quiero”:

  • Una intencionada acción, por ejemplo, “Quiero llegar a mi casa antes de que llueva y me moje.
  • Una preferencia general o particular a futuro, por ejemplo, “Quiero tener una casa para vivir feliz junto a mi familia.

 

Paralelamente, el cambio climático está exacerbando este problema (Ministerio del Medio Ambiente, 2016). La zona central de Chile ha experimentado sequías más frecuentes y prolongadas, la disminución de las precipitaciones y el aumento de las temperaturas agravan la desecación de la vegetación, incrementando la cantidad de material combustible disponible aumentando la vulnerabilidad creando condiciones ideales para la propagación de incendios (Barton y Irarrázaval, 2016).

En ese sentido, una forma en que las regiones del sur están desarrollando su distribución territorial y que afecta la forma en que se debe planificar ciudades o territorios al crear intencionadamente interfaces urbano-forestales es el conflicto que se genera entre la creación de áreas de conservación de biodiversidad con fondos privados y las parcelas de agrado. Por ejemplo, en Chile, las áreas protegidas públicas cubrían en 2015 alrededor 14.2 millones de hectáreas en donde las áreas protegidas privadas adicionaban a esta cifra 325.000 hectáreas (Sin considerar el parque privado Pumalín que cubría otras 300.000 hectáreas). Al 2023, se cuenta con alrededor de 18 millones hectáreas en áreas protegidas públicas (Fundación Terram, 2024).

Frente a este panorama, la prevención y adaptación emergen como pilares fundamentales para mitigar el riesgo de incendios. Estrategias como la gestión adecuada del uso del suelo considerando las proyecciones del cambio climático (Barton y Irarrázaval, 2016), la creación de zonas de amortiguamiento entre áreas forestales y urbanas, y la implementación de prácticas agrícolas y forestales sostenibles pueden reducir significativamente la vulnerabilidad de estas zonas ante el fuego.

La educación y concienciación de la población también juegan un rol crucial. Es imperativo que las comunidades locales comprendan los riesgos asociados a los incendios forestales y participen activamente en la prevención de los mismos. Esto incluye desde la adopción de buenas prácticas en la gestión de residuos hasta la participación en programas de reforestación y conservación de ecosistemas.

La creciente amenaza de los incendios forestales en la interfaz urbano-forestal de Chile es un recordatorio urgente de la necesidad de adoptar un enfoque más holístico y sostenible en la gestión del territorio. La prevención y adaptación no solo requieren de políticas públicas efectivas y de la implementación de prácticas de gestión de riesgos, sino también de un cambio en la conciencia colectiva sobre nuestra relación con el medio ambiente.

Es fundamental reconocer que el bienestar de nuestras comunidades y la preservación de nuestros ecosistemas están intrínsecamente ligados (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), 2022). Solo a través de una acción colectiva y coordinada, basada en el respeto por la naturaleza y en la adopción de prácticas sostenibles, podremos enfrentar los desafíos que los incendios forestales presentan para la sociedad chilena. En última instancia, la capacidad de Chile para adaptarse y mitigar los efectos de estos desastres naturales dependerá de nuestra voluntad para actuar.

 

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Referencias

Barton, Jonathan R, y Irarrázaval, Felipe. (2016). Adaptación al cambio climático y gestión de riesgos naturales: buscando síntesis en la planificación urbana. Revista de geografía Norte Grande, (63), 87-110. https://dx.doi.org/10.4067/S0718-34022016000100006

Fundación Terram (19/01/2024). Chile sumó 240.000 hectáreas de parques nacionales en 2023 pero denuncian falta de presupuesto https://www.terram.cl/2024/01/chile-sumo-240-000-hectareas-de-parques-nacionales-en-2023-pero-denuncian-falta-de-presupuesto/#:~:text=“Este%20insignificante%20aumento%20no%20se,una%20superficie%20de%20242.360%20hectáreas.

Instituto Nacional de Estadísticas (INE). (2020). Reporte de incendios forestales en Chile. https://www.ine.gob.cl/sala-de-prensa/prensa/general/noticia/2022/12/28/informe-anual-de-medioambiente-superficie-dañada-por-incendios-forestales-aumentó-en-temporada-2021-2022

Ministerio del Medio Ambiente. (2019). Plan de Acción Nacional de Cambio climático 2017-2022. https://estrategia-aves.mma.gob.cl/wp-content/uploads/2023/03/MMA-2017-Plan-de-Accion-Nacional-de-Cambio-Climatico-2017-2022.pdf

Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). (2022). El estado de los bosques del mundo 2022: Las vías forestales hacia el desarrollo sostenible. https://www.fao.org/publications/home/fao-flagship-publications/the-state-of-the-worlds-forests/2022/es

Wong, David (August 11, 2014), “5 Ways you’re Sabotaging Your Own Life (Without Knowing It)”, Cracked Magazine, New York. Available at http://www.cracked.com/blog/5-ways-youre-sabotaging-your-own-life-without-knowing-it/#ixzz3B9KbNtNp