Ciudades Intermedias

Abril 2016

«Ciudades Intermedias en Chile: Territorios Olvidados»

Actualmente debemos saber más de nuestras ciudades intermedias no sólo porque hay un vacío en esta materia, sino también porque corresponden a una gran oportunidad para lograr desarrollar ciudades más sustentables
Revista Planeo Nº 27,  Ciudades Intermedias, Abril 2016
[Por Martín Montes. Licenciado en Ciencias Sociales y Sociólogo, Universidad Católica de Chile. Estudiante Magíster Desarrollo Urbano, Universidad Católica de Chile]
Título: “Ciudades Intermedias en Chile: Territorios Olvidados”
Editores: Francisco Maturana M. Andrés Rojas B.
Edición: RIL Editores. Santiago, 2015; 260 páginas.
Resumen: Una de las principales temáticas de discusión que se han dado en Chile -y el mundo- en los últimos años ha sido la desigualdad, sin embargo su análisis y reflexión se ha concentrado en el aspecto socio-económico, dejando de lado otras dimensiones de ésta. Una de ellas corresponde a la desigualdad territorial, temática que, al menos en Chile, es de muchísima relevancia en los tiempos actuales. Si bien pareciera haber consenso de que Chile es un país sumamente centralizado y que por lo mismo es necesario tomar medidas al respecto, esta discusión no ha logrado instalarse de lleno en la agenda pública. Por su parte la academia ha colaborado con la reproducción de este centralismo en la medida que se ha concentrado en el estudio de lo que ocurre en las áreas metropolitanas y poco se sabe de lo que pasa fuera de las grandes ciudades. En ese sentido el estudio de las ciudades intermedias adquiere suma importancia no sólo porque existe un vacío importante sobre este tipo de asentamientos, sino también porque corresponden a una gran oportunidad para anticiparnos a los errores que hemos cometido en las grandes ciudades y lograr desarrollar ciudades más sustentables.
Palabras clave: Ciudades Intermedias, Descentralización, Desigualdad territorial.
Im1_RES_MONTESIm1. Portada del libro

A mediados del año 2015 dos investigadores del Instituto Chileno de Estudios Municipales (ICHEM) de la Universidad Autónoma de Chile lanzaron el libro “Ciudades Intermedias en Chile: Territorios Olvidados” el cual reúne un total de diez artículos científicos que nos invitan a conocer y aprender de éstos territorios. El libro está dividido en dos partes; la primera busca aportar elementos teóricos para la comprensión y estudio de las ciudades intermedias, y la segunda tiene un carácter más práctico dado que concentra interesantes casos de estudio sobre distintos tipos de análisis de este tipo de ciudades.

Bajo la perspectiva teórica, François Taulelle entrega valiosos elementos para comprender por qué la conceptualización de las ciudades intermedias ha sido tan compleja. El autor destaca la importancia de considerar el contexto y las particularidades que poseen este tipo de ciudades y por ende el valor que tienen los estudios de casos. Por su parte Francisco Maturana, uno de los editores del libro, profundiza en la evolución que ha tenido el concepto de ciudad media al de ciudad intermedia, indicando que el primero se refiere principalmente a factores cuantitativos (cantidad de población, extensión de la ciudad, etc.), mientras que el segundo se enfoca en la capacidad que tiene un territorio de integrarse al sistema de ciudades a partir de sus características propias. Junto a esto se destaca la propuesta metodológica que ofrece Maturana la cual identifica a 22 ciudades chilenas como ciudades intermedias invitando a utilizar dicha metodología como base para estudiar este tipo de ciudades en Chile. Bajo un análisis histórico Rojas, Maturana y Morales dan cuenta que el centralismo en Chile es un proceso que se ha ido acentuando cada vez más con el tiempo y se pregunta ¿cuál ha sido el rol del Estado en esta materia? En otro artículo, Vial nos ofrece un rico análisis sobre las limitaciones que posee nuestra institucionalidad para gobernar los territorios, y las complejidades que tienen las ciudades intermedias, en particular aquellas que están conurbadas, fenómeno cada vez más común en este tipo de ciudades. Dado que el Estado no ha sido el único actor que ha dejado de lado a las ciudades intermedias, Martínez da cuenta que la academia no ha sido capaz de superar los alcances teóricos ya que no se han elaborado metodologías concretas para el análisis y gestión de riesgos naturales, tema de suma importancia para un país como Chile. Finalmente Terra, a través de una propuesta metodológica bastante innovadora en base a indicadores integrales, da la señal de alarma sobre la necesidad que tenemos de preocuparnos de estos espacios ya que evidencia los procesos de deterioro urbano que han sufrido algunas ciudades intermedias chilenas producto de la visión extractivita que se tiene del territorio.

En línea con lo propuesto por Taulelle, la segunda parte del libro se enfoca en estudios de casos, buscando entregar elementos para la discusión sobre las ciudades intermedias de manera aplicada. En este sentido Lufin y Atienza dan cuenta del importante rol que tienen las ciudades intermedias en los flujos de circulación de trabajadores en el sistema de conmutación intercomunal, invitando a aplicar en concepto de intermediación y evitando el estudio del territorio como espacio aislado. En la misma línea, Henríquez et al. estudian la influencia que tienen las grandes áreas metropolitanas de Chile y la actividad minera en el mercado de suelos y los procesos de transformación socio-territorial de la conurbación Rancagua-Machalí. Sobre dicho estudio se destaca las fuerzas que inducen a que las ciudades intermedias sufran procesos de metropolitización, así como también el hecho que la cercanía con las grandes ciudades puede llegar a impedir el despliegue de un desarrollo local autónomo. Por otro lado, Hernández trata una temática de suma relevancia para el actual contexto chileno; ¿cómo avanzar hacia un sistema de gobernabilidad más inclusivo y participativo? Ante esto el autor estudia las potencialidades y limitaciones que tienen las ciudades intermedias como espacios para el desarrollo de la gobernanza utilizando tres casos de estudio como referencia. Finalmente Rojas y Rojas estudian el patrimonio de Curicó para dar cuenta de que si no se aplican políticas integrales de planificación y protección patrimonial continuarán los procesos de pérdida del patrimonial arquitectónico de nuestro país.

La diversidad de artículos sobre ciudades intermedias que se presentan en este libro no solamente constituyen un importante avance para conocer más sobre los distintos fenómenos urbanos de estos territorios, sino que también –y de manera más importante aún- son una invitación a estudiar las ciudades intermedias y poner sobre la mesa la discusión sobre las desigualdades territoriales que existen en nuestro país.

A pesar de que según el último censo confiable (año 2002) más de un tercio de la población chilena vive en ciudades intermedias, la relevancia de estos asentamientos no ha logrado instalarse de lleno en la agenda pública. Por su parte la academia ha colaborado con la reproducción de este centralismo en la medida que se ha concentrado en el estudio de lo que ocurre en las áreas metropolitanas, dejando a las ciudades de menor escala con escasa información para diseñar políticas públicas propias que respondan a las necesidades particulares de su territorio. En ese sentido el estudio de las ciudades intermedias adquiere suma importancia no sólo porque existe un vacío importante sobre este tipo de asentamientos, o porque cada una de ellas posee sus propias particularidades (y por lo mismo no podemos analizarlas bajo el mismo prisma que las áreas metropolitanas), sino también porque corresponden una gran oportunidad para anticiparnos a los errores que hemos cometido en las grandes ciudades y lograr desarrollar ciudades más sustentables. O como bien dicen Maturana y Rojas: “frente a los espacios metropolitanos, otras ciudades podrían constituirse en una alternativa para una ocupación más equilibrada del territorio, de manera de aprovechar en plenitud sus distintos potenciales y, a su vez, generar un mejor acceso a diferentes bienes y servicios, aspecto importante para mejorar las condiciones de vida de las personas.” (p. 9)