Planeo Digital

Número 2

La participación en disputa

Abr 2012

La reconstrucción de los movimientos sociales urbanos

Imagen vía flickr por talcahuanofotos

Título: La reconstrucción de los movimientos sociales urbanos. Aprendizajes a partir de caso de la Coordinadora de Pobladores José María Caro en Santiago de Chile
Autor: Leslie Parraguez Sánchez
Año: 2008
Tipo Tesis: Tesis presentada al Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la Pontificia Universidad Católica de Chile para optar al Grado de Magister en Desarrollo Urbano
Profesor Guía: María Elena Ducci

(Viene de la Introducción)

La investigación pretende realizar dos ejercicios indagatorios concatenados. Por un lado, busca aportar a la discusión teórica en torno a la reconstrucción de lo colectivo en el actual campo de historicidad, es decir, en el proceso global de urbanización capitalista. Por otro, busca profundizar los hallazgos de la indagación teórica a través del estudio de una acción colectiva emblemática en la historia contemporánea de la ciudad de Santiago de Chile.

Con todo, se pretende comprobar que la actual proliferación de “conflictos urbanos” en la ciudad corresponde a la emergencia de nuevos movimientos sociales y no solo a explosiones aisladas y fugaces de descontento, como suele describírseles. Ello, a través del estudio de la relación dialéctica entre la transformación de “lo colectivo” y las transformaciones urbanas que se gestan a partir de los cambios en la arquitectura productiva global.

Desde la discusión bibliográfica se definen los términos para abordar –pero no predeterminar-, el caso de estudio, que corresponde a uno de los conflictos urbanos más reconocidos que se han desencadenado en la ciudad en el último período, protagonizado por la Coordinadora de Pobladores José María Caro, en la comuna de Lo Espejo. Como varias otras agrupaciones de Santiago de Chile, se organizan para cuestionar el proceso de actualización del Plan Regulador Comunal, por haber sido gestado sin la participación amplia de los vecinos; imponiendo un modelo de desarrollo urbano que no sólo implicaría la transformación radical del estilo de vida barrial, sino también la paulatina expulsión de los habitantes de esta histórica población.

(Viene de la Fundamentación)

Esta investigación responde a un interés profundo por el debate académico y político en torno al tema de la “muerte de lo colectivo” y el “triunfo del individualismo negativo” en el actual contexto social. En este sentido, se está de acuerdo con quienes defienden la idea de dictámenes. Una de las señales, a la cual esta investigación busca otorgar visibilidad, es la proliferación de “conflictos urbanos” en la ciudad de Santiago de Chile: reacciones colectivas que se oponen a aquellas intervenciones urbanas –públicas y privadas-, que, según sus protagonistas, trastocan arbitrariamente sus entornos locales de vida.

Esta publicación, permite, además, deducir una importancia creciente del fenómeno para la opinión pública, al menos aquella interesada por las tendencias contemporáneas de lo urbano hoy. Pero, más importante, podría significar un avance para estas luchas, al dejar de ser interpretadas como situaciones aisladas, sino como una “cuestión urbana”. El sencillo acto de examinar los nombres de estas agrupaciones ciudadanas permite obtener pistas en este sentido, ya que todas estas acciones colectivas para sintetizar su interés de lucha hacen uso de conceptos muy cercanos en términos de significado: “defensa”, “no”, “salvemos” o “rechazo”.

Ahora, más que buscar regularidades, esta investigación se propone mirar con nuevos ojos estas manifestaciones colectivas, en un esfuerzo por evidenciar las consecuencias que tiene para los sujetos que no se preste atención en forma crítica a sus transformaciones. Detrás de esta acción, de acuerdo con Matus (2006), hay todo un nuevo mapa de preguntas que hacer emerger. La primera, seguramente, debería proponerse dilucidar si la situación descrita más arriba responde a una simple coincidencia o, más bien, se está ante una clara señal de que, más allá de las especificidades de cada una de estas movilizaciones ciudadanas, algo nuevo ocurre en la ciudad. Más concretamente, ¿es posible afirmar que estamos ante la emergencia de nuevos movimientos sociales en la ciudad de Santiago de Chile?

(Viene de Pregunta de Investigación)

A partir de la discusión bibliográfica, fue posible definir los términos para abordar el fenómeno de estudio. En paralelo, se eligió el cas de estudio que corresponde a uno de los conflictos urbanos más relevantes que se han desencadenado en la ciudad en el último período: la Coordinadora de Pobladores José María Caro, conformada por habitantes de la población del mismo nombre situada en la comuna de Lo Espejo. Como varias otras agrupaciones en la ciudad de Santiago de Chile, se organiza para cuestionar el proceso de actualización del Plan Regulador Comunal, por haber sido gestado sin la participación amplia de los vecinos, imponiendo un modelo de desarrollo urbano que implicaría la paulatina expulsión de población y transformación radical del estilo de vida de esta histórica población.

(Viene de Hipótesis de Trabajo)

El elemento constitutivo específico de la Coordinadora es la identidad espacial que defiende. Sin embargo, con el transcurso del tiempo, se identifica también con una reivindicación contraofensiva, específicamente, la lucha por el derecho a la ciudad.

La Coordinadora se constituye como un movimiento social urbano emergente ya que resuelve la tensión entre sus intereses defensivo y contraofensivo, al fundar su acción en valores modernos y, desde ello, al integrarse en redes de agrupaciones con conflictos similares en Santiago, a través de mecanismos de información y comunicación innovadores, sin renunciar por ello a su lucha específica.

(Viene de la Metodología)

Para cumplir con los objetivos de esta investigación, se optó por un estudio de caso paradigmático, desarrollado a través de técnicas cualitativas. La selección de dicho caso (la Coordinadora de Pobladores José María Caro) se realizó de modo intencionado, de acuerdo a dos criterios: la visibilidad pública de la agrupación y su nivel de convocatoria y éxito, que al momento de su ceración (2005) era inédito todavía a nivel de ciudad, especialmente para los sectores de bajos recursos.

La unidad de análisis de este estudio es el discurso –y acciones asociadas- desarrollado por la Coordinadora. Para reconstruirla se consultaron distintas fuentes primarias y secundarias de información.

(Viene de Conclusiones)

A partir de la cartografía construida, se abren las siguientes cuestiones: ¿es posible seguir estudiando a los movimientos sociales sólo desde su tensión fundamental general? Más bien, ¿puede seguir considerándose que la tensión fundamental específica de los movimientos sociales emergentes es sólo una precisión de la tensión general? ¿O debe ser considerada como una nueva dimensión de este fenómeno?

En este sentido, se propone que la emergencia de movimientos sociales en Santiago de Chile responde más bien a una doble tensión: la superposición de la tensión fundamental general o temporal (pasado-futuro) y la tensión fundamental específica o espacial (dentro – afuera). Por un lado, la tensión fundamental general ahora es denominada como temporal, ya que plantea a los MSE el desafío de la transformación, es decir, de conquistar el futuro de la ciudad, a partir de la inclusión de la identidad espacial –construida con el presente y su pasado- como criterio para el desarrollo urbano. Por otro lado, la tensión fundamental específica es ahora señalada como espacial, ya que plantea a los MSE el desafío de ver más allá de su propia forma espacial de desarrollo geográfico desigual, es decir, mirar hacia afuera y desbordar su lucha hacia otras escalas.

Así, se concluye que la Coordinadora de Pobladores José María Caro no se constituye como un movimiento social al no resolver la tensión temporal, que continúa siendo el elemento clave para su consolidación, no por rigidez teórica, sino porque para los propios sujetos continúa siendo un desafío en construcción. Por lo tanto, más importante es entender cuáles son las circunstancias del ejercicio político en el cual se involucra, que sólo le permiten alcanzar la legitimación de sus argumentos en la toma de decisiones a nivel local.

En este sentido, se identifican algunos factores internos, como sus estrategias de gestión confrontacionales y su rigidez propositiva, muy relacionados con la desconfianza profunda de os habitantes de la población hacia las estructuras de poder político y económico. Porque la Coordinadora no sólo debe convencer a las autoridades sobre la validez de sus argumentos, sino que también debe convencer a sus representados sobre la validez de los procedimientos.

Si bien esta investigación no pretende desestimar el daño profundo de las desconfianzas en los sectores más excluidos de la ciudad, representados por los pobladores del sector F de la José María Caro, es posible concluir que aún existen materiales disponibles para la reconfiguración de lo colectivo, como el espacio de vida, que para e caso estudiado representa aquello que los transforma en sujetos emancipados y, por lo tanto, debe ser defendido. Defensa que no se configura aisladamente, sino de modo relacional, específicamente, desde la comparación con otros.

Se debe recordar que la reconstrucción de lo colectivo es un proceso socioespacial inserto en un proceso global de urbanización capitalista, caracterizado por un desarrollo geográfico desigual, donde los atributos del espacio que inauguran y sostienen la acción colectiva (calidad social, funcional y simbólica) no están distribuidos equitativamente en la ciudad, ayudando a entender por qué muchos son excluidos del ejercicio político de reapropiación de la ciudad que anuncian las agrupaciones urbanas. De ahí la importancia de la superación del encierro comunitario y la inclusión de la perspectiva urbana en la argumentación de estas luchas, ya que sin ello difícilmente pueden pretender un impacto global, mejorando las oportunidades concretas para acceder a la reconstrucción de lo colectivo y al debate sobre cómo queremos vivir hoy desde la diversidad socioespacial de la ciudad.