Planeo Digital

Número 2

La participación en disputa

Abr 2012

Los Gaths de Varanasi

 

Vista desde los Gaths a Varanasi y el Ganges

[María Angélica Illanes]

 Varanasi es tal vez  una de las ciudades más impresionantes de la India, al menos para el visitante occidental, sobre todo si ésta es su primera experiencia con culturas distintas a la greco-romana. En cierta forma en ella se encuentra contenido todo lo que simboliza India, sus laberínticas calles, atiborradas de prácticamente todo: millones de personas (vestidas de las más variadas formas y colores), vacas, motos, rickshaw, puestos con comidas callejera (increíblemente condimentada y picante), bazares en los que se vende de todo, imágenes y templos por todas partes de distintos dioses que dan cuentan de las la diversidad religiones que aquí coexisten y miles de turistas tratando de comprender y moverse en este caótico ambiente llevando siempre bajo el brazo una guía turística.

rickshaw

Bajar del tren y enfrentarse a esta lógica tan distinta no es fácil es una experiencia intimidadora y bastante estresante, pero una vez que ya se está en medio de toda esta vorágine se empieza a agarrar el ritmo y Varanasi comienza a mostrar su lado más amable, sobre todo cuando se llega al borde del rio Ganges y al fin se comprende por qué esta ciudad atrae a tanta gente de tantas partes de India y del mundo.

La ciudad se extiende a lo largo de la ribera occidental del Ganges, siendo éste una suerte de frontera para su expansión. En la ribera opuesta se pueden apreciar una zona inundable despejada y con algunas tierras verdes, probablemente hay algunos cultivos y un poblado menor. Contrario a lo que se podría esperar, esta condición de límite natural no ha hecho que la ciudad le de la espalda al río, sino todo lo contrario, el centro de la vida de Varanasi acontece justamente en donde se produce este encuentro  de la ciudad con el río, los gaths de Varanasi.

La traducción de gaths sería algo así como escaleras o peldaños y precisamente eso son, grandes escalones que se hunden en la profundidad del río que sirven como una suerte de muelles inundables para que, sin importar el nivel de las aguas, las personas siempre puedan acceder a las sagradas aguas del Ganges. De esta forma la ciudad se encuentra verdaderamente enraizada en las aguas del río, así como los árboles en los manglares. La vida de la ciudad parte y finaliza en las orillas del río, al igual que la vida de muchos hinduistas.

Varanasi, 6:30 amA las 6:00 am ya es posible apreciar el movimiento (no hay guía turística que no ordene estar despierto para asistir al espectáculo, y por lo demás los primeros rezos se pueden escuchar desde las 3:00 am por los altoparlantes de los distintos templos de la ciudad, por lo que no hay riesgo de quedarse dormido), con las primeras hogueras que empiezan a prenderse, y es que servir como crematorio es una de las principales funciones de los Gaths. Varanasi es considerada una ciudad santa para los hindúes, según la mitología, una de las cabezas de Brahma logró descansar sobre ella. Este “toque de la divinidad” hace que quien muera en Varanasi o en un radio de pocos kilómetros sea liberado del ciclo de reencarnaciones, por lo que mucha gente viene a morir aquí o al menos trata que sus cenizas sean tiradas en estas sagradas aguas. Los crematorios se organizan según castas y zonas de las Indias, los ritos fúnebres también varían según la casta y la condición social, los más acaudalados pueden costear pilas fúnebres de madera de sándalo, mientras que los con menos recursos son cremados en hornos a gas, pero a fin de cuentas las cenizas de todos terminan en el fondo del río, con la salvedad de los cuerpos de los niños y de las mujeres embarazadas, que no requieren pasar por este rito de purificación por encontrarse en un estado de gracia.

 

La imagen de los crematorios es de las cosas que más impactan al visitante, no sólo porque es un enfrentamiento a la muerte sin tapujos, sino por lo diferente que es “todo”: el llanto aquí no es el protagonista del rito, los familiares (sólo hombres casi sin excepción) aguardaban con calma a que el cadáver fuera consumido por las llamas, sin molestarle que hubieran turistas observando y personas haciendo sus rutinas cotidianas alrededor: bañándose, lavando ropa, refrescando a los animales y comerciando.

Es una manera de comprender la vida, la muerte y el mundo en general diametralmente opuesta a la nuestra. Prácticamente todos nuestros tabúes, desde los más triviales como el baño hasta los momentos trascendentales como la muerte, tienen lugar en el espacio público. Es una vivencia que cuesta digerir, un enfrentamiento con una cultura milenaria que en nada se asemeja a la nuestra, pero que hace que venir a India y conocer los Gaths de Varanasi sea una experiencia única.

"Main Gath"